Se le acusaba de graves irregularidades, incluida presunta la interferencia en la investigación de su hermana acusada de favorecer a narcotraficantes.
La Junta Nacional de Justicia (JNJ) tomó la decisión de destituir a Patricia Benavides como fiscal suprema debido a una serie de faltas graves durante su gestión como Fiscal de la Nación. Entre estas faltas se destacan su presunta intervención en la investigación contra su propia hermana, la jueza Emma Benavides, quien estaba siendo investigada por presuntamente favorecer a personas involucradas en narcotráfico.
El respaldo unánime de los consejeros de la JNJ, incluyendo a María Zavala, magistrada titular, fue clave para esta decisión. Zavala, en su función, sustentó el informe final del proceso disciplinario y propuso la destitución de Benavides tanto como fiscal suprema como del cargo de Fiscal de la Nación, al cual había sido suspendida previamente.
Además de la posible interferencia en la investigación contra su hermana, a Benavides también se le cuestionó por presuntamente favorecer a Miguel Ángel Vegas Vaccaro al nombrarlo en un cargo en la Fiscalía Suprema Especializada en Delitos Cometidos por Funcionarios Públicos. Se alega que, cuando Benavides era jefa del Área Especializada en Denuncias contra Magistrados, impidió que Vegas Vaccaro fuera procesado por presunta corrupción.
La decisión de la JNJ también incluyó la destitución de Azucena Solari como fiscal suprema provisional en la Segunda Fiscalía Suprema y de Emma Benavides como jueza superior de la Corte Superior de Justicia. Aunque se puede plantear un recurso de reconsideración contra la decisión, esto no suspende la ejecución de la sanción.
Una vez que la decisión sea consentida o ejecutoriada, la Junta procederá a cancelar los títulos de magistradas de Patricia Benavides, Enma Benavides y Azucena Solari.
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