El humorista político plantea la necesidad de aplicar la pena capital en casos de delitos flagrantes respaldados por pruebas sólidas, a través de juicios rápidos y sumarios.
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Carlos Álvarez, el comediante conocido por su sátira política, abogó por la aplicación de la pena de muerte en situaciones de delitos flagrantes con evidencia contundente respaldados por procesos judiciales breves y eficientes. En sus propias palabras: “Tenemos que terminar con esta gente”
Álvarez, quien ha sido un crítico contundente de la corrupción y ha abogado repetidamente por la pena de muerte en el país, se mostró crítico ante la falta de severidad en el sistema de justicia y la permisividad que permite a ciertos agentes del orden facilitar la entrada de más delincuentes al territorio nacional, especialmente en la frontera norte, donde denuncia la presencia de organizaciones criminales que traicionan a la patria.
Durante una entrevista en el programa #BaellaTalks, conducido por el periodista Alfonso Baella, fundamentó su propuesta en base a crímenes brutales ocurridos en Lima y otras partes de la nación. Menciona el caso de Christopher Fuentes, alias "el maldito Cris", un delincuente venezolano que asesinó a tiros al empleado municipal de Surco, Luis Manrique Pizarro, de 55 años.
Álvarez se refirió también a casos similares, como el ataque de Sergio Tarache Peña, compatriota de Fuentes, quien roció a Katherine Gómez, de 19 años, con gasolina y le prendió fuego, a pocos metros de la concurrida Plaza Dos de Mayo, en el centro de Lima. También hace mención del trágico incidente de Eyvi Lizeth Ágreda Marchena en 2018.
Con un tono enérgico y con conocimiento de las amenazas de muerte que ha recibido en varias ocasiones, Álvarez enfatizó que estos individuos no deben ser deportados del país, ya que podrían regresar a través de la frontera norte. En consecuencia, reafirmó su posición de que los perpetradores de crímenes brutales deberían enfrentar la pena de muerte.
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