Ola de violencia sacude a Ecuador con ataques coordinados, toma de rehenes en un canal de TV y la declaración de conflicto armado interno. El país busca restablecer la paz mientras la comunidad internacional expresa su solidaridad.
El alcalde de Guayaquil, Aquiles Álvarez, dio a conocer que al menos ocho personas perdieron la vida y dos resultaron heridas en una serie de ataques armados que tuvieron lugar este martes en distintos puntos de la ciudad. Estos incidentes ocurrieron poco después de que un grupo altamente armado tomara el control del canal TC Televisión, tomando como rehenes a los empleados.
El alcalde confirmó la trágica pérdida de vidas y los heridos, detallando que, aunque la policía logró retomar el control de las instalaciones del canal y arrestó a trece personas, otros lugares de la ciudad fueron escenario de actos violentos, resultando en la muerte de ocho personas. Guayaquil, siendo el epicentro de la violencia y la segunda ciudad más grande del país, experimentó robos, saqueos y tiroteos en áreas comerciales.
Individuos armados ingresaron al canal de televisión durante una transmisión en vivo, amenazando a los trabajadores y obligándolos a tirarse al suelo. Los atacantes, con el rostro cubierto por mascarillas y pasamontañas, llevaban no solo armas de fuego, sino también explosivos como granadas y dinamita, los cuales exhibieron ante las cámaras durante la transmisión en vivo.
La policía logró recuperar las instalaciones del canal mediante un operativo que incluyó unidades especializadas, tácticas, helicópteros y el uso de armas de diferente alcance. En respuesta a estos hechos, el presidente de Ecuador, Daniel Noboa, declaró un conflicto armado interno en el país y ordenó la salida de las fuerzas militares en todo el territorio.
El periodista Christian Espinoza sugirió que la toma del canal de televisión en Guayaquil fue una respuesta coordinada de la delincuencia organizada al estado de excepción y toque de queda decretados recientemente por el presidente. Este incidente se suma a otros actos violentos que afectaron varias ciudades del país.
En el operativo policial, se capturaron a trece delincuentes y se rescataron a los rehenes sin lamentar víctimas. Sin embargo, el hallazgo de una granada con insignias similares a las de las Fuerzas Armadas de Perú entre las armas utilizadas por los delincuentes señala la posibilidad de que grupos criminales estén utilizando armas contrabandeadas desde Colombia y Perú.
Ante la crisis de seguridad, el Parlamento ecuatoriano anunció la oferta de indultos o amnistías a policías y militares que contribuyan a garantizar la seguridad del país. Las Fuerzas Armadas de Ecuador, por su parte, afirmaron que no negociarán con terroristas y que responderán de manera contundente a cualquier amenaza.
La comunidad internacional, incluyendo países como Perú, Colombia, Paraguay, Brasil, Chile, Costa Rica, República Dominicana y Estados Unidos, expresaron su condena a los actos de violencia en Ecuador y ofrecieron su apoyo al gobierno ecuatoriano.
Ante la creciente inseguridad, el gobierno peruano declaró en emergencia toda la frontera norte del país, implementando medidas adicionales para resguardar las fronteras con Ecuador. La Policía ecuatoriana informó que hasta el momento se han detenido a 70 personas en los operativos llevados a cabo en el marco del estado de excepción y el conflicto armado interno declarado por el presidente Noboa.
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